Las películas "de nazis" son ya un subgénero del cine bélico. Esta de la que hablamos es particularmente espeluznante, y eso que en toda ella no se escucha un solo tiro ni se ve una sola imagen dura. Al contrario, se desarrolla en un ambiente lujoso y tranquilo, en el interior de una elegante mansión en la que quince hombres están reunidos. Lo que ocurre es que esa reunión es nada más y nada menos que la conferencia de Wannsee (20 de enero de 1942), en la que fue tomada la decisión de proceder al exterminio de los judíos de los territorios controlados por el estado nazi. Y la decisión es tomada entre cigarros, cafés y un excelente bufé. Como si nada.
Está en la biblioteca de Villena.